LECTURA: Los que tengan Biblia que la compartan.

Por favor, los que tengan Biblia que la compartan. Volteo y ahí estaba Stephen. Pudo haberse llamado Ramiro, Lars, igual daba.

Mucho, pero mucho tiempo quise contar esta mini historia y por alguna razón no lo había hecho, era algo mío, creo que ya no lo es…

El luto que llevo de las personas con quien me relaciono y quienes por diversas circunstancias ya no nos vemos es largo, y me cuesta salir adelante porque los lazos son fuertes.

-Que tal vos mucho gusto, sentate. Lean el versículo tal capítulo tal-. Este cuate me encanta, me decía pa mis adentros, habrán llegado mis oraciones esa noche porque ya no nos separamos, ya no tuve concentración, -acompañame-, me dijo.

-Fíjese pastor que mi novia no viene a la iglesia-. -Esos son yugos desiguales- le dijo el pastor, -Lo mejor es separarse-. Yo efectivamente inclinaba la cabeza varias veces en señal de aprobación, así fue como empezó nuestra amistad, así fue como maduré a pijazos, tendría veinte o veintidós, un muchachón enamorado era yo me acuerdo, quería ser mejor por él, de la nada empecé a andar como en las nubes, a ser otro cuate, a ver el mundo color pastel, estaba siendo mejor persona por él, no fue planificado, si lo digo ahorita es porque no me había dado cuenta de esos detalles, que sin ellos no habría nada, es eso que no se explica, ese querer sin más, el estar sin más, el no hacer nada con él, fueron horas, días, semanas, meses los cuales nuestra razón fue la iglesia, fue Dios, y así se mantuvo, ese fue el pretexto para seguirnos viendo...

-Me dicen Chespirito y no entiendo- me dijo, yo me reí, -Hijos de puta, cómo se atreven a llamarle así a mi príncipe-, Él era bajito igual que yo, velludo, desgarbadito.

-Sabés que no entiendo las canciones de Shakira.- Me dijo un día, -Claro a la Shakira quien la entiende, yo tampoco la entiendo- le dije. Así pasaban las horas con él, sin nada especial más que estar, le quise, juro que me enamoré, claro, no fui correspondido.

-Creo que ya estoy preparado para ser padre- dijo alegremente, ¡mierda que cuentazo!, y yo que hago con todo esto mejor cambio de tema: -Sabes, hay un retiro cristiano, ¿Vamos? - -No puedo-, me dice, -Esta bien, voy yo solo-, y ahí va el gran imbécil al matadero, ahí voy cantando, orando en hermandad la liberación. -Fijate Stephen que cuando dijeron que si queríamos pasar al frente a dar nuestro testimonio, pasaron muchos-, Ajá, el me escuchaba, -Y pasé yo entonces; hermanos quiero contarles, les quiero confesar que yo soy homosexual...- El silencio me sepultó en el más negro infierno, sus miradas clavadas en mí ahí yo sólo, y qué putas ahora cómo salgo de esto?… Y creo hermanos que Dios me va a curar. Eso les dijiste me dice, pues si, yo eso es lo que sentí en ese momento y te lo cuento porque nuestra amistad inicio en el cristianismo, claro, pero porque tenias que contarlo. Maldita sea tenia razón, ahora ya la cagué me dije, pero como si nada seguimos platicando, un concierto cristiano era el plan para la tarde, terminamos de comer y matamos el tiempo por ahí, el ya se sentía intranquilo, como haciéndome huevos, pero no se, él estaba mal y yo peor, sabés, me dice en un banca: yo tengo un amigo a quien le he contado un secreto, pero no sé, y yo maldita sea Stephen decime que onda, como querrás yo te entiendo, no, no puedo, me tengo que ir, se va corriendo. ...miro mis manos, la bolsa con la playera que le compré, voy tras él, le grito, me espera, te compré esto, y pase lo que pase, sigamos a Dios, que fue el principio de nuestra amistad, el se voltea, sigue huyendo de mi, yo me volteo y camino un largo calvario a la iglesia para el dichoso concierto, me fui llorando, no me sentía bien, no tenia ganas de nada, era un peso que no podía cargar solo, le entregue mi pena a Dios en ese momento, solo yo alabando, llorando, poco a poco me fui descargando, me fui sintiendo mejor, salí riéndome me acuerdo que al subir el bus me pregunte porque estaba alegre si en realidad estaba triste; mi pena había cambiado a un gozo inexplicable. Nunca me olvidé de el, si la fantasía de que el vuelva ya no persiste, aún queda la ilusión de querer ser mejor por alguien.

Historia escrita por MANRA
Link: http://manra.blogspot.com/